En febrero del pasado año 2015 a través de una crítica gastronómica muy favorable, tuve conocimiento del establecimiento Taberna-Sidrería Txacolí, regida por nuestro paisano Paco García Vela. Se puede recordar visitando la publicación de entonces:
Con posterioridad a aquella publicación, nos hemos visto en varias ocasiones en el pueblo y existía por ambas partes el compromiso de llevar a cabo una visita a este establecimiento con la idea de comprobar la veracidad de las buenas críticas que recibe en algunos foros de internet. El pasado sábado tuve la oportunidad de llevar a cabo una visita familiar (acompañado de Pili, mi esposa, mi hija Silvia y Sebas, su marido) a la Taberna Sidrería El Txacolí, donde fuimos recibidos por Paco y Mª José, su esposa con un gran cariño.
En primer lugar nos mostraron las instalaciones con una decoración que simula un establecimiento vasco-navarro y que en este día se encontraba al completo. Elaboran una cocina vasco-navarra, tratándose de un establecimiento algo diferente a lo acostumbrado debido a que permite la degustación de cualquiera de sus platos del restaurante también en la barra, lugar éste muy adecuado para la degustación de un buen abanico de pinchos.
Como primera visita, optamos por degustar en la barra algunos de los platos de los que ya teníamos constancia por las críticas de su bondad y dejándonos también aconsejar por Paco.Yo me quedo con un grato recuerdo de la tortilla de bacalao, chipirones encebollados y zancarrón de ternera. En el apartado de bebida, al no ser apreciadores del buen vino que sé que tiene Paco en su bodega, sí que probamos la sidra navarra que nos resultó muy agradable. También degustamos un gran pacharán casero que él elabora.
En una próxima visita optaremos por la cuchara como dice Paco y podremos degustar algo exquisito como puede ser un arroz caldoso con bogavante.
Además de lo puramente gastronómico pude observar el trato amigable y profesional tanto de ellos, como dueños y máximos responsables del establecimiento, como del resto del personal, hacia sus clientes. Me dio la impresión que cuentan con un buen número de clientes habituales que pueden acudir tanto por la buena calidad de su gastronomía como por el buen trato recibido.
Al no ser un entendido gastronómico, para una valoración de este establecimiento, he acudido a alguien en el que confío totalmente en este aspecto, nuestro paisano Eduardo Navarrina Rueda, quién me asegura que Paco es un gran profesional, empeñado totalmente en la mejora de su trabajo y queriendo que sus productos sean los mejores del mercado y apreciados por sus clientes y que realmente su carta está llena de platos de calidad, así como también cuenta con una extensa y buena bodega de vinos.
Finalmente, agradecer a Paco y Mª José el trato recibido a toda la familia, sencillo y cariñoso y asegurarle que nos veremos de nuevo por allí.
Aquí os dejo unas imágenes de recuerdo de esta entrañable visita.
